Pescado de la familia de la raya de cuerpo aplanado y cartilaginoso que habita en las profundidades marinas bajo la arena, es muy apreciado en la gastronomía venezolana insular por ser la proteína principal en la elaboración del popular pastel de chucho margariteño, posee grandes cantidades de omega 3, ayudando a mejorar la actividad cardiovascular.

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